Elimina toxinas y aumenta la circulación. Al oxigenar la piel, da una apariencia "radiante" y saludable, mejorando, además, la elasticidad de la piel.

Actúa como sanador emocional y reduce el estrés. Favorece el drenaje linfático y la eliminacion de líquidos, dejando la piel suave, luminosa y fresca.

El frío que aporta la propia piedra desinflama, refresca el enrojecimiento en pieles con Rosácea y aporta una sensación increíble de bienestar al confluir el masaje de la piedra con las cremas deslizándose sobre tu piel.

Si deseas potenciar sus efectos enfríala en la nevera durante unos minutos antes de su uso

Limpia tu rodillo con algún tónico natural sin abrasivos. Para desinfectarlo puedes hacerlo con un paño suave y alcohol.